CUARTERO DIRÁ ADIÓS AL ZARAGOZA ESTA SEMANA.
Fuente:
Diario EQUIPO
Luis Carlos Cuartero acudirá a las oficinas del club para negociar la liquidación de su contrato, una formalidad que debería ser un trámite y que terminará con los veinte años en el Real Zaragoza del ya excapitán. Salvo que surjan imprevistos, las intenciones tanto del exfutbolista como de la directiva son anunciar inmediatamente después una rueda de prensa de despedida.
El exjugador, que se encuentra pasando unos días de vacaciones junto a su familia en Andorra, recibió el viernes por la tarde una llamada de Eduardo Bandrés en la que el presidente le ofrecía la posibilidad de anunciar ayer mismo su retirada. Cuartero declinó la invitación alegando que no quería convertirse en protagonista un día antes de que el equipo afrontase un partido tan importante como el que esta tarde disputa ante el Hércules. Así, Cuartero y Bandrés se emplazaron a mañana o pasado para resolver los asuntos pendientes para después organizar la despedida del excapitán.
La idea del club es acompañar a Cuartero y hacerle sentir el apoyo y el calor de la institución en el que será el difícil trago de su despedida del deporte de élite. Por su parte, el capitán quiere que todo se haga con la mayor normalidad posible. Hasta el final, el de Pradilla de Ebro quiere llevar a gala la discreción con la que ha manejado su carrera. Pondrá punto y final a veinte años de zaragocismo, catorce en el primer equipo. Se irá con dos Copas del Rey, una Supercopa y habiendo representado al Zaragoza en todas las categorías inferiores de la selección española de fútbol.
Como sucediera recientemente con César Láinez y con César Jiménez, el club quiere que Luis Carlos Cuartero se despida de la afición desde el césped de La Romareda. El sueño del excapitán era haberlo podido hacer vestido de corto, pero no podrá ser por mor de la gravísima lesión de rodilla que le ha obligado a retirarse. Así, la idea es que el exfutbolista aragonés salga al césped minutos antes del partido ante el Sevilla Atlético, para así recibir la última muestra de cariño de la afición del Real Zaragoza.