Lesiones del Corredor: Síndrome de la cintilla iliotibial

LESIONES DEL CORREDOR: SÍNDROME DE LA CINTILLA ILIOTIBIAL

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19/02/2014 9:00:00

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Colegio Profesional de Fisioterapeutas de Aragón. Autora: Beatriz Lasheras Abadías, colegiado nº 798

Dentro de las patologías más comunes en la práctica de running encontramos esta lesión, también conocida como rodilla del corredor. Es típico que el dolor comience de forma gradual, normalmente a partir de los diez minutos de carrera, empeorando en bajadas porque el roce es mayor.

La cintilla iliotibial es una gruesa banda de tejido fibroso que nace en la cadera, recorriendo la cara lateral del fémur hasta llegar a la rodilla en su parte externa, siendo aquí donde se produce dolor, inflamación y crepitación debido a la irritación por deslizamiento repetido.

La causa principal de este síndrome es un aumento demasiado rápido del volumen de entrenamiento (tiempo o número de kilómetros corridos cada semana).

Factores favorecedores a padecer esta patología son la debilidad del glúteo medio, el acortamiento muscular de flexores de cadera y del tensor de la fascia lata, así como un mal funcionamiento de la musculatura estabilizadora lumbar.

En la prevención y tratamiento de este síndrome se deberán analizar los factores individuales favorecedores de esta patología y consistirá básicamente en realizar un trabajo de fortalecimiento de glúteo medio y de control de cadera, así como de la musculatura lumbar, estiramientos de la cintilla, mejora en cadencia y técnica de carrera, así como ser muy progresivos en el aumento de volumen de entrenamiento.

Una vez instaurada la patología la vuelta a la carrera debe ser gradual, disminuyendo el volumen, con entrenamientos de intervalos a ritmo alto y terreno llano (el roce de la cintilla es mayor a ritmos bajos y en las bajadas), para ir aumentando el volumen muy progresivamente, siendo lo último en introducir los terrenos con cuestas.

Nuestro consejo es que seáis muy progresivos, es la clave para no sufrir esta y el resto de lesiones típicas del corredor, así como mantener un buen estado muscular de las lumbares y la cadera.