AGUJETAS
Fuente:
Colegio Profesional de Fisioterapeutas de Aragón. Autor: Juan Luis Nápoles Carreras. Nº Colegiado 837
Por definición, las famosas agujetas son un dolor localizado a nivel muscular de aparición tardía, normalmente por dos causas. Bien por haber realizado un sobreesfuerzo o por la realización de un esfuerzo al que los músculos utilizados no están entrenados ni acostumbrados.
Antaño se creía que aparecían por una acumulación de ácido láctico, teoría descartada ya que este era el resultante de la actividad metabólica en las células musculares que se acaba “cristalizando” y esto provoca ese dolor muscular. Queda totalmente rechazada por la comunidad de investigación sanitaria y en general a nivel fisiológico.
Realmente lo que ocurre ante un sobreesfuerzo es que se le obliga a las fibras musculares a un castigo por encima de su entrenamiento y trofismo provocando “microrroturas” de las fibras musculares que se refiere como dolor muscular e inflamación, también puede ser que una persona muy entrenada pueda tener agujetas al realizar un ejercicio en el que utiliza otros grupos musculares diferentes a los que utiliza habitualmente.
Por ejemplo un atleta de maratón muy entrenado, sale un día en piragua y tendrá lo más probable agujetas en todo el tren superior.
También pueden aparecer por “microlesiones” ya que el incremento local de la temperatura en los músculos durante la práctica de ejercicio las provoca,sufriendo también dolor muscular.
Por tanto la solución no es tomar agua con bicarbonato sódico o azúcar como reza la creencia popular por la teoría demostrada como falsa del ácido láctico además esto puede provocar problemas gástricos, en lo que realmente consiste es en realizar un aumento progresivo del nivel de entrenamiento acompañado de un calentamiento y estiramientos tanto antes como después del mismo, para así ir ganando trofismo y que nuestras fibras musculares estén en la mejor disposición para la actividad que se va a realizar.
Si con todo esto aparecen en mayor o menor medida las agujetas, se puede y se debe seguir realizando ejercicio estirando bien nuestras fibras musculares para la desaparición de las mismas.