LOS CINCO ERRORES COMUNES DEL CORREDOR PRINCIPIANTE
Fuente:
Expansión
El running está de moda. Pero sus músculos y articulaciones le agradecerán que no lo haga de cualquier forma. Estirar, no excederse en los entrenamientos o estar bien preparado para empezar con las series son algunas de las claves para correr de forma saludable.
1.- No tener un plan realista
No se puede empezar a correr de cero. Algunos nuevos corredores contemplan la caminata como una deshonra pero es, sin embargo, uno de las mejores técnicas para comenzar -y seguir- un buen método de carrera. No se trata de ir deleitándose con los pájaros del camino, hágalo a buen ritmo, exagerando el braceo. El buen pulsímetro le será muy útil para asegurarse de no hacer esfuerzos innecesarios. Así, durante las primeras sesiones no es recomendable superar el 80% de tu máximo.
Además, también es una buena idea combinar el running con otras técnicas, como nadar o ir en bici: realizará un entrenamiento más integral del cuerpo y evitará castigar en exceso músculos y articulaciones.
2.- Saltarse los estiramientos
Es cierto que, hecho polvo tras la carrera, puedan dar un poco de pereza, pero son absolutamente necesarios para evitar lesiones y, en realidad, son solo diez minutos. Concéntrese en estirar cuádriceps, isquiotibiales (clave porque se acortan en la carrera), gemelos (que se sobrecargan mucho tras una carrera de más de media hora) y piramidal. Mantenga la posición del estiramiento al menos veinte segundos, sin hacer rebotes y en el punto en el que se siente tensión, nunca dolor.