¿ES RECOMENDABLE HACER ABDOMINALES PARA EL DOLOR DE ESPALDA?

Aquellas personas que padecen de dolor lumbar, a menudo se les han prescrito realizar abdominales, pero ¿es realmente indicado realizar abdominales ante el dolor lumbar? Vamos a intentar hacer una reflexión sobre si el trabajo de abdominales convencionales ayuda o por el contrario puede llegar a ser contraproducente. La musculatura abdominal tiene como uno de sus principales objetivos controlar la columna vertebral por delante y mantener en su sitio las vísceras.

Los músculos que tradicionalmente denominamos “abdominales” son 4: transverso del abdomen (el más importante), recto abdominal, oblicuo menor y oblicuo mayor y todos ellos poseen un objetivo en común: mantener entre ellos una perfecta relación para mejorar el control anterior de la columna vertebral y mantener el equilibrio con la musculatura posterior de la espalda para evitar padecer dolor en la parte baja de la espalda o dolor lumbar. Las patologías de espalda suelen aparecer por el continuado desequilibrio entre la musculatura posterior y la anterior (abdominales). Este desequilibrio puede venir por la mala actuación del grupo abdominal y por malas actitudes posturales. Con el paso del tiempo, la musculatura posterior cede, se reduce el espacio vertebral y surgen los problemas.

Si al realizar la acción de flexión del tronco (o abdominales convencionales) no existe una correcta coordinación entre los cuatro músculos abdominales el trabajo que realizamos es contraproducente. En situaciones de dolor lumbar, el transverso del abdomen suele ser incapaz de realizar bien su función (fijar el abdomen y la columna lumbar). Y, si al realizar la flexión del tronco el transverso no actúa correctamente, tendremos un recto del abdomen muy fuerte, pero estaremos incrementando el problema.