MARC GASOL: «SE AGRADECE UNA CIUDAD VOLCADA COMO ZARAGOZA»

- Pleno de victorias en la preparación, mejor imposible.
Bueno, siempre se puede mejorar. Los resultados ahora no son lo más importante, pero las sensaciones están siendo buenas.

- Se están mostrando muy superiores a selecciones como Eslovenia o Lituania, ¿hay algún equipo que les preocupe de cara al Europeo?
Nosotros mismos. Si defendemos y trabajamos como sabemos, en equipo, todo irá bien. Todo lo demás ya lo veremos.

- Personalmente ha tenido que dar un paso adelante con la ausencia de su hermano Pau
Yo el paso adelante lo iba a dar estuviera Pau o no. Ya venía preparado para ser más importante que años anteriores.

- Supongo que le esperan con los brazos abiertos de cara a la fase final.
Por supuesto. Sin Pau esto no es lo mismo. Somos un equipo muy bueno, que podemos dominar a cualquiera, pero imagínate con Pau.

- ¿Cómo se lleva eso de ser hermano de un campeón de la NBA?
Con mucho orgullo. Ha sido un sueño ver a tu hermano ganar el anillo, la cara que tenía y que todo el mundo estaba pendiente de eso y lo deseaba. Es un sueño, es increíble.

- Y con algo de envidia sana.
No, con ningún tipo de envidia.

- Y ahora llega el torneo de Zaragoza, una cita que ya empieza a ser un clásico en la preparación.
Sí, nos gusta jugar allí, es una ciudad volcada con su equipo, lástima que este año hayan vuelto a la LEB. El descenso es un golpe duro, pero nosotros estamos ahí para apoyar el baloncesto de Zaragoza.

- Ya el año pasado la ciudad se volcó con ustedes a pesar de que el partido ante Hungría no era demasiado atractivo.
Para nosotros era importante aquella cita, y no fue tan mal. Es de agradecer una ciudad así y ver el pabellón así de lleno, animando, y al salir, todo el mundo esperándonos. Eso se agradece muchísimo.

- Aunque usted juega en la NBA supongo que habrá seguido la ACB de este año que ha visto como volvía a perder a Zaragoza, una pena dado que es una ciudad de baloncesto.
A nadie le gusta bajar, yo lo he vivido de cerca en Gerona, y eso es muy duro. La gente a la que le gusta el baloncesto seguirá ahí. Hay que tener paciencia.

- El torneo de esta semana es ante Israel y Polonia, dos selecciones que no son de primerísimo nivel, pero que están en el Europeo.
Son dos equipos duros, atípicos, sin muchas estrellas. Son selecciones no tan conocidas, pero difíciles de jugar.

- Por cierto, ¿qué tal su año en la mejor liga del mundo?
Muy contento. Ha sido un año que al principio fue duro por perder muchos partidos, pero con el cambio de entrenador hubo cambio de actitud del equipo. Al final, trabajamos con un objetivo que es esta próxima temporada.

- Da la sensación de que ha evolucionado mucho físicamente. Ha perdido peso y ha ganado músculo.
Es un objetivo que tenía para este verano y he trabajado en ello.

- ¿Cuál debe ser la clave para luchar por las medallas y optar al título europeo?
La clave estará en los cuartos de final. Antes nadie te va a regalar nada, pero lo fundamental está en ese cruce.

- Iba a decir que el oro sería la guinda a un ciclo, pero por lo que viene por detrás hay selección española para rato.
Ya veremos. Una de estas claves son una generación (la del 80) única en la historia del baloncesto europeo y casi diría que mundial. Lo han dado todo, y nos hemos ido uniendo otros jugadores más jóvenes. Estamos aprendiendo de los mayores, pero la base, el corazón de la selección son ellos y cuando no estén vamos a ver qué pasa.